Son Servera 43 - La Salle B 107
Alabado sea el electrónico, y no por el tanteo final, amplio dirán algunos, sino porque permitió que nuestro Junior B jugara el primer partido de 40 minutos de la temporada.
Las huestes lasalianas arrasaron Son Servera dejando el bar del esplendido poliesportiu Es Pinaró -quien pudiera jugar siempre en una cancha como aquella- tiritando. El Sr Ribas con sus 3 bollycaos contribuyó en gran medida. 1r cuarto: la igualdad. Ambos equipos cogieron cartas. La Salle, muy inocentemente, se creyó el farol del Son Servera que solamente con una pareja -soberbios 10 y 15- puso en aprietos al visitante (20-21). Intercambio de puntos cual si combate Goku vs Vegeta.
2o cuarto: cambio de timón. Sota, caballo, rey... El rapapolvo del minidescanso fue clave. El farol ya no se lo creía nadie (30-50) y el temido Vegeta pasó a ser un tímido Neville Longbottom que pedía permiso para tirar a canasta.
3r cuarto: al abordaje. Los visitantes tras probar las mieles de la victoria se echaron a la carga con la pasión propia de Atila y todo su séquito. Equipo local desorientado y fuera de sí, tanto que incluso un jugador tras poderoso rebote defensivo disparó a propia meta... suerte para él que erró. Suspiros entre el público.
4o cuarto: reparto del botín. El pirata visitante Tony Ballester se subió las calcetas y pasó a dominar todo el campo de batalla. Desplegó el estandarte lasaliano consiguiendo al final 25 puntos y 12 rebotes. Jugador destacado.
En definitiva, victoria merecida pero quizá excesivo castigo para un equipo local que mientras pudo físicamente hizo las cosas bien.