Partido raro, raro, raro.
El primer cuarto de película 33-17 con soberbios ataques y una defensa seria. Pero a partir de ahí,
se acabó la fábula y empezó la pesadilla. Nos creimos que estaba ganado y nos olvidamos de lo importante: defensa, ataque organizado, de ser un equipo, y sobre todo humildad. Aún así acabamos 51-38 a favor.
La segunda parte empezamos genial recuperando en parte esos principios que debe tener el equipo. No duró mucho, en el minuto 5 entramos de nuevo en una rueda de descontrol: protestas, técnicas, mala seleccción de ataque, etcétera. Todo esto unido, hizo meterse de lleno a Sa Pobla en el partido.
Suerte que al final las técnicas del rival por protestas ayudaron y conseguimos acertar lo justo para ganar 87-83.