Ayer jugamos el partido trampa de esta temporada frente al Consell que todavía no ha estrenado su casillero.
Nuestro objetivo, jugar, pasar de 40 puntos y anotarnos todos los parciales. Sacamos el partido sin los 40 puntos y regalamos el último parcial y llegamos a ver las orejas al lobo.
El eterno problema, la falta de acierto, 16 de 79 tiros de campo, 20%, 4 de 17 tiros libres, 23,53%, permitió al Consell mantenerse en el partido y rearmarse moralmente, cuando el partido nos tenía que haber servido para romper nuestro tope anotador, no todos los días tiras casi 80 tiros, y que jugadoras que no suelen anotar, se sumaran al ataque. Por supuesto, mi ayudante Aina se quedo sin casillas en la plantilla para tiros y rebotes ofensivos.
En fin, vamos avanzando en la clasificación, gracias a una buena segunda vuelta con un balance de 3 de 5 partidos, que contrasta con los 2 de 11 de la primera. El sábado nos visita CB Santa Maria, equipo “rockero” que vendrá a romper la racha contra La Salle.