El título de este artículo no se refiere al éxito de haber quedado campeones de Baleares, sino al hecho de haber podido convivir con estos chavales estos dos años, de haber podido trabajar duramente con ellos, y digo duramente porque ha sido UNA PASADA, son como esponjitas, que absorben y absorben y quieren más y más. Son trabajadores, disciplinados, buenas personas y sobre todo, lo que es mejor, forman un grupo ideal.
Han conseguido formar un auténtico "equipo" y digo equipo porque lo es de verdad; juntos conseguimos estar ahí arriba, porque, habiendo indudablemente jugadores de más calidad que otros, lo que nos ha hecho grandes y nos ha diferenciado de otros equipos, es la labor de todos, el saber que todos los jugadores son importantes, que si uno falta no pasa nada porque ahí está el resto para asumir responsabilidades.
Ellos han aprendido, no cabe duda, muchas cosas durante este tiempo, pero es verdad que ellos me han enseñado también mucho a mí, tengo mucho que agradecerles porque he disfrutado muchísimo con ellos, y aunque feliz por cómo hemos terminado la temporada, también estoy un poquito triste porque esto se acaba.
Por supuesto que todo esto no seria posible sin el grupo de padres que tenemos, que me perdonen los demás equipos, pero el mini A tiene la mejor afición posible, muchas gracias papás por vuestro respeto, confianza y apoyo incondicional a la labor desarrollada con vuestros hijos.
ENHORABUENA A TODOS, nos seguimos viendo en las pistas, y chavales ¡adelante, esto no ha hecho más que empezar!, os esperan años de trabajo pero también de grandes satisfacciones.